Después
de un año en el poder las obras brillan por su ausencia; las empresas del
estado que más facturan han sido ya repartidas entre la gallada, y las que
deberían mejorarse están camino a ser vendidas o sus servicios privatizados; a los
organismos de control los prostituyeron (ya que la corruptela vuela alto, y ese
ente es usado para presionar o destruir a los funcionarios que no se alinean
con el desgobierno); la justicia es botín socialcristiano; y la prensa mercenaria
desinforma impunemente.
Recuerdo
lo mucho que cacareaban algunos desinformados que con Correa nos vamos a
convertir en “Venezuela” (refiriéndose al problema económico que sufre ese país
debido principalmente a la guerra económica iniciada por los grandes
empresarios) y aquello jamás estuvo ni cerca de pasar. Pero, después de la consulta, el desgobierno
cuántico se ha empeñado en convertirnos en una “Colombia” (refiriéndome al
conflicto interno, narcotráfico, y terrorismo que intenta superar aquel país
desde hace décadas).
¡El
desgobierno usa el show mediático, y abusa de ello!
Mucho
o todo ha tenido que ver el desgobierno cuántico con los sucesos acontecidos
las últimas semanas. Ante la presión puesta por el tío Sam para instalar
nuevamente una base militar y de inteligencia en suelo ecuatoriano el traidor
servilmente tomo acciones al respecto: desmantelando la Secretaría de
Inteligencia nacional, desatendiendo las fronteras, haciendo caso omiso de los
informes que pedían tomar acciones de seguridad interna debido al nuevo
escenario en la frontera norte, firmando un acuerdo con el gobierno colombiano,
el cual le significó “comprarse un conflicto ajeno”. Todo parece valer para el Judas a la hora de
mostrarse servil al imperio.
La “estrategia
del miedo” empezó a usarse masivamente.
Cada
día la prensa mercenaria empezó a mostrar una nueva “amenaza” a la seguridad
del país: al principio falsas alarmas de bombas que calaron poco en una
sociedad tranquila, pero luego se les empezó a escapar de las manos y se
perdieron vidas humanas.
De
este escenario que el gobierno inepto de Judas ayudó a crear, el tío Sam está
presto a sacar su beneficio, ya se ha ofrecido a “colaborar” para luchar contra
el terrorismo, ya se nota la presión “diplomática”.
Mientras el gobierno y la prensa “manejan”
cada asunto como un "reality show", hablando mucho y concretando nada, en el país
se sigue perdiendo todo lo logrado.
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| Contexto: En el gobierno de Rafael Correa se combatía el tráfico de droga soberanamente, y con mejores resultados. |
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